Ella no hay más que una

Ella, la más bella. Y se encendió la lucecita en un tipo amable y simpático: "ella es mi hija, es ella y nadie más. Y por qué ponerlo con minúscula, lo escribiré con mayúscula, que es nombre propio."
Ahora qué, si todas las demás también, las que han sido, son y serán ella, son mujeres a nuestro alrededor a las que cuando no nombramos incluimos en nuestro discurso con ese mismo pronombre. ¿Original? La originalidad es una cualidad muy loable, la creatividad en nuestros días es cada vez un valor superior, la unicidad es un objetivo digno, pero claro, hay que saber algo: que un nombre propio que pretendía ser original es el más común de todos, ya que se aplica a todas las mujeres, una a una. Por otra parte, no me creo que a Pepe Pérez, de Soldaduras Pérez S.L. le hubieran permitido en el Registro semejante tontería (no me parece otra cosa). Se me ocurre que próximas sugerencias podrían ser: Cualquier (sólo apto para varón), Aquella (con posibilidades infinitas como nombre compuesto), Ese Punto y Coma, José Caprichos, María de la Sílaba Átona, o Nokia 5000. O pronto como en Venezuela, pidiendo control porque esto se va de las manos.
Somos libres para nombrar, pero hay normas que acatar, no vale cualquier palabra, un pronombre no puede ser utilizado como nombre propio. Como se nos han terminado los nombres que conocíamos..., bueno, los que conocían los del bautizo novedoso.
Algunos días no me parece mala idea la del examen para la paternidad.

2 me subrayan o me tachan:

Didac Valmon dijo...

el conocimiento de la gramática, y la poca importancia que se le da provoca cosas copmo esta. A mí me pasa como a ti, pero la gente piensa que en estos asuntos todo vale, aunque no sea así.

ELFI dijo...
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